Cada año el mismo puñetero lio. Se acaba el pasado y comienza el futuro. Un futuro virtualmente siempre mejor, una esperanza que por unos días nos alivia el alma.
Las horas van acercandose al final, al ocaso de un día. Un momento donde iniciar el fin del resto de nosotros.
La espera
no me hace morir,
peor,
me desespera.
Si no fuera tal
sino un descanso,
bien,
no estaría mal.
Aun no consigo
ni deshacerme
ni olvidar
este castigo.
Estoy lastimero
sin compañía,
pero aquí
te espero.
No,
no sé.
Sobre eso
si que no sé,
y ni tampoco
de lo de aquello sé.
Sí,
si sé.
Sobre eso
si que sí sé,
y que también
de lo de aquello sé.
No, si sé.
Sobre eso
si que no sé
y sé también
que es aquello que sé.
Días felices de Navidad
en los que parecemos
estar obligados
a sentirnos felices.
Y tú pareces
tan sólo empeñada
en contagiarme
la tristeza y el enfado
impropios de tal época.
Qué era eso
que tanto te molesta
que das para sufrir.
Si me dijeras el porque
para saber que es
sabes que lo aguantaría
y me callaría.
Detrás de mi ventana
domino el color de la vida.
El tiempo que pasa
envejeciendo un día
que rápido acabara.
Mientras repaso los recuerdos,
transportes a lo fantástico,
tengo los mismos sentimientos,
que hace tiempo no tengo.
El sol atraviesa el cristal
iluminando, calentando
la piel de mi áspera cara,
inflando el ego perdido
por sobrevivir, por escapar.
Y sólo yo he sido capaz
de olvidar a los demás,
de dejar el dolor,
como una espina envenenada
que no se puede sacar.
Llegué a estar seguro de
que ya no importaba,
que era otro de muchos.
Caí con verdadera torpeza
en un autoengaño
empeñado en creer
una mentira.
Largas avenidas asfaltadas de gris
recorridas desde el alba de un ayer
hasta el amanecer de mañana.
Y con cada paso
un recampanazo abrumador
dentro de mi cabeza
ocupada en asimilar
la misma e insistente
idea falsa.
Pero ya no más,
Ahora encontré lo exacto,
aquello necesario
que sin duda quiero.
Mi vida es otra
como lo fue antes mi mente.
A veces pienso si soy
o no soy realmente.
Quizás pudiese ser
aquel hombre,
que conseguía perderse
incluso en habitaciones cerradas.
La realidad que se abre,
a donde quiera que mire,
es tan condenadamente extraña.
Mi memoria me lleva
a colores brillantes y rápidos,
a montañas altas y andantes.
Cualquier cosa era imposible
de no realizarse.
Siempre y cuando no
pudiese hacerse
donde la gente de gas,
el mundo prohibido
donde ahora estoy,
gracias y posible
a lo posible de lo imposible.
Ya no hay lamentos.
El cielo oscurece rápido
quemando las azoteas
dejadas por los pájaros.
De gris-azul a negro-azul
sin preguntar.
El amor es envidia,
es locura y corrosión.
Lo es todo y nada
también.
El amor es olvido,
es picadura, es perfume.
Es un instante,
es toda una vida.
El amor es esperanza,
es eso, es aquello.
Es deseo, es siempre
y es jamas.
El amor es fruta,
es llama, es hielo.
Es juego, es palabra
al aire.
El amor es opaco
es solitario y mudo.
Es indulgente,
también indecente.
El amor es necio,
es superior, tan pequeño.
Es espejismo, es solo
incoherencia.
El amor es viaje,
es sincero y tonto.
Es fin, desde el principio.
¿De verdad que es esto?
¿Lo que yo siento?
Sorprendente es el destino
como lo es el amor.
Doloroso es el engaño
como lo es el desamor.
El simple entendimiento
de la palabra
es en si mismo el milagro.
Tanto consecuencia
como causante
de miles de respuestas,
con otras tantas
de esas palabras
unidas y entrelazadas
en un universo
de milagros únicos.
a cada cual verdadero
ante los propios de los demás,
que asienten y sonríen
con burlona astucia.
Ante la ignorancia total
de sus coexistentes,
creadores y recolectores
en solitaria convivencia,
eterna coincidencia
de sus prohibidos espacios.
Reducidos habitáculos
que aunque móviles
insuficientes en su conciencia
de perpetraciones mayores.
Ilusiones de otros tiempos,
de lugares exteriores,
lejanos y extensos de espacio
infinito.
Estaba buscando alguna oferta de una camara de fotos y creo que me quedare con esta.
El tiempo torcido
en un cuadro de Dalí,
amenaza con detenerse.
El espacio dividido
en un tratado de Euclides,
amenaza con desaparecer.
Y si fuera poco,
para total destrucción,
los colores se deshacen,
las formas se derriten.
Así fuera tan dulce la muerte
mientras se olvida
una vida que dejar atrás.
Habiendo recorrido los desiertos.
Habiendo surcado los océanos.
¿Que debería,
qué necesitaba
allí encontrar?
Habiendo perdido el pensamiento.
Habiendo olvidado sentir.
Hoy he leído una noticia sorprendente, "Burger King lanza un perfume para hombres olor hamburguesa". Ya lo del perfume es raro, pero que además su olor sea hamburguesa lo lleva al extremo.
En primer lugar, creo que la palabra perfume se refiere a olores agradables y una fritanga de carne no es un aroma demasiado fino. La sola idea de pasar cerca de un tio apestando (porque reconozcamoslo, los tios nos pasamos de cantidad con estas cosas) a grasa, no es bueno para la salud olfativa. Esos olores suelen quedarse bien dentro de la nariz, y luego es difícil sacárselo.
Seguramente los responsables de Burger King no se han parado a pensar que el "olor a choto" no es precisamente un gran afrodisiaco para las mujeres. O realmente si han pensado en los efectos secundarios, como una forma de atraer a las mujeres a sus productos. Una trampa olorífera mortal, donde el descerebrado macho es el anzuelo perfumado.
Como esto le de ideas a otros, me veo el año que viene abriendo mi regalo de navidades, y con sorpresa ver la nueva "Eau de Roquefort".
Siete campanadas
antes de la caída de un imperio.
Ahora ninguna
a la desaparición de una vida.
Se que no es tan importante;
aun menos, interesante.
Si no fuera la mía
quizás podría.
Pero que puedo recibir
si creo no haber dado jamas,
si creo no haber sido amado.
Unas lagrimas brillantes.
Las mejillas empolvadas.
La conciencia perdida.
El olor de flore
ocultando su hedor.
Oídos que no oyen plegarias.
Las manos rígidas
sobre seda y terciopelo.
Un llanto compungido.
Unas salvas atronadoras.
Un bonito cadáver.
Escindido de mi pensamiento
vago entre las penumbras
de mi ulterior conocimiento.
Como si un mar bravo
se tratara,
todo meneara
para pasar un mal trago.
Sin aun poder recomponer
un pedacito de mi,
entre escombros de mil falsas ideas.
La desesperación de no tener
consistencia de mi,
me hunde agotado en sus mareas.
Pierdo a grandes trazos
la esencia de mi única
existencia.
Y no pienso ya en lo anterior,
aquello que ya no es mío.
Y no lo hecho de menos,
ya no necesito desearlo.
Las noches pasan una a una con miles de pensamientos dentro de mi cabeza. La soledad, fría y oscura llena la habitación a pesar de los destellos de la televisión. No se realmente que estoy viendo, solo intuyo luces, pardadeos y un susurrante sonido.
Mis dedos se enfrían y mi corazón vuela hacia el mundo de los sueños en tu busca. Poco a poco la respiración se hace más y más profunda. Allí no tengo que esperar, allí es ahora...
Cuando te conocí
contabas dieciséis,
no me resistí.
Ya con diecisiete
no dejaba de verte.
En los dieciocho
no me volví loco
por muy poco.
Olvidarte uno no puede
después de vivir
y también compartir
aquellos diecinueve.
Hasta los veinte
jamás había sentido
algo tan fuerte.
Ahora a los veintiuno
no serán como ninguno.
Ambos desnudos, libres y solos
en un gran lago,
en un día brumoso.
Yo elevado sobre las aguas
con los brazos abiertos
y tú fuera de mi vista, lejos.
Con la cabeza atrás
y cerrados los ojos, un grito,
una imploración, una llamada.
Puedo verte en mi mente;
en tu rostro, tu mirada.
Desde las curvas de tu cadera
hasta los pechos, los hombros,
bajando toda la espalda.
Y siento que me miras,
que estás muy cerca.
Oigo tu aliento, a cada movimiento,
huelo tu aroma.
Has venido, ya estás aquí
delante de mi.
Sólo tú puedes tocar
y también yo te quiero amar,
acariciar tu piel
donde resbalan gotas de agua,
mis lagrimas en tus mejillas
que yo te limpiaré.
Tienes ahora todo mi amor,
cada sentimiento que tengo por ti.
Conoces mi ser
y ya no puedes mirarme sin mas.
Te recoges en tu interior,
acurrucada en un ovillo a mis pies
¿Triste quizás?
Fundida en el agua que estuvo siempre tibia
la carne de todo tu cuerpo se eriza
por el frío, por el saber de mi.
entro en el agua a tu mismo nivel
y mis manos descubren tu cara escondida,
dichosa en el interior como el cuerpo
colmado de felicidad.
Levantémonos como uno solo,
enlazados tanto las manos como los corazones.
Una mirada y un deseo único,
abracémonos unidos en un beso prolongado.
Viajamos donde existimos
ambos desnudos, libres y solos.
En escasos 5 minutos he leido como dos blogs (ubuntu life y doctor JB) van a dejar de segir activos. Es una pena porque en ambos casos yo me pasaba por ellos para leer alguna cosa interesante y graciosa. Si hace un tiempo paso lo mismo con varios blogs a los que visitaba, ¿Pudiese ser que mi simple acercamiento a ellos los derribase? ¿Seré un virus contra blogs?
Espero que esto no se convierta en una plaga, y me quede sin lugares donde despejar mi mente de otras cosas.
Espero que sea un hasta luego.
Caigo en espiral
sin ningún dolor;
olvidando cualquier color.
Blanco y negro,
teñida la realidad.
Detenido el tiempo,
desapareciendo el espacio.
Euforia sin sentido,
lagrimas de llanto
por saber.
Agotando la vida
que no queda ya,
escapando de la huida.
Me acabo de dar cuenta de un detalle interesante, que seguro entrara dentro de las leyes de Murphy. Cuando estás viendo la tele, coges el mando para hacer zapping y tras varios canales con anuncios (que en ocasiones son el mismo pero retrasados unos segundos) llegas a un canal con una pelicula ya empezada. La escena te suena, te detienes para ver que pasa y comienzas a notar que ya lo has visto.
Lo gracioso es cuando esto mismo te pasa varios dias después, y con la misma pelicula y misma escena. Como si fuera el dia de la marmota esperas la siguiente frase que acompañas. Es una sensación estraña pero gratificante.
Si con ser
no ser
fuera,
sólo sería
ser
que no sería.
Quizás fuera
ser
que no era,
si no fui
no ser
que fui.
Lucho
y lucho con energías
pero más empeño tendría
si recompensa viera.
La monotonía mata
tanto como la espada.
Serán las nubes grises
que me abruman
los pensamientos.
Y tornan presumbrosas
mis alegrías.
Cobarde me llamo
y con razón, creo.
Mas me enfrentaría
con uno o cien
y todos a la vez.
Estúpido y loco
eso si lo soy.
En una pequeña habitación de hotel mis parpados se cierran . Respiro profundamente e intento volver a escuchar su corazón, tan fuerte como ayer. Como al sentirlo con mi cabeza en su pecho, mientras el día acababa. Abrazado a ella esperando que aun estuviese más tiempo junto a mi.
El cielo ya está oscuro y el aire tan frio, que el aliento baila delante de mi. Mis manos buscan las suyas, para calentarlas, para besarlas. Pero ayer se fueron, se alejaron como otros días mientras en las yemas de mis dedos queda aun su tacto.
Al mirar a traves de la ventana, puedo ver alguna estrella perdida entre las nubes. Y pienso si ella también las ve, si mira con mi misma melancolia la oscuridad, la soledad. Un escalofrio recorre mi cuerpo y mis labios desean su boca, tan asiosos como ayer la besaban.
En minutos la noche me atrapara en sueños, en finos hilos de tiempo y espacio que me uniran a ella, y la felicidad será plena en mi hasta despertar.
Hay veces que me pregunto cosas, que son poco más que anécdotas para los tiempos de crisis. Para la mayoría, ponerse a pensar en donde estamos cuando imaginamos será una estupidez supina. Pero yo al acostarme suelo imaginar una vida fuera de los problemas de la vida real y me siento de puta madre.
Al imaginar esas situaciones, esa vida paralela donde yo controlo realmente mis movimientos (aunque mira que soy idiota total, que alguna vez me he puesto trabas dentro de mi propio sueño), y noto como mi cuerpo físico está en esos escenarios. Algunos pensantes hablan de viajes astrales, que podría decirse que casi si. Otros dirían que estoy más pa'lla que pa'ca, que seguramente será eso.
Aún así, si al soñar o imaginar en esa otra vida, te sientes mejor en ella y esta (la supuesta real) desaparece, porque no quedarse.
http://www.flickr.com/photos/kiarras_marinero/
La obsesión por ver si alguien ve mi trabajo (por decir algo), me llena de angustia, a veces. Miro a otros y tienen cientos de visitas y comentarios, y vuelvo a mi miserable contaje con la cabeza gacha y el rabo entre las piernas. Me pregunto como lo harán, algún truco tendrá, digo yo.
Si por lo menos, los tres o cuatro que os pasais por aqui lo veis, pues eso que ya he ganado. Gracias.
Siento la vida.
Siento sin pasión.
Creo en amar.
Creo sin pasión.
¿Qué nos ocurre?
¿Qué hemos hecho?
No podemos olvidar.
No podemos dejarlo atrás.
¡Quiero vivir!
¡Quiero amar!
¡Quiero la pasión!
Son todo palabras
sobre un papel,
y solo antes pensadas
en mi imaginación.
Durante el sueño
se vuelven
crudas y verdaderas.
Pero están tan lejos
tan inalcanzables,
que llegan delate de ni
y pierden su sentido.
Se desorientan
en una pequeña inmensidad,
en una hoja en blanco.
Singular descubrimiento
que sin sentido
refleja mi desasosiego.
La locura
y después el duelo,
entre todos los seres
que existen en mi,
es la presignación
que me sigue
siempre
durante mi vida.
Tomar una posición
incomoda
increíblemente sufridora,
es una elección
difícil
verdaderamente agotadora.
Siempre viviendo angustiado
por creer estar engañado.
Callado tienes que observar
y sumiso por amor, aguantar.
¿Quién no ha enloquecido
alguna vez
o cada vez
que ha querido?
El dibujo no escribe
la poesía no pinta
ninguno es la realidad
pues los dos mienten,
entonces yo también.
Ni en el espacio
fuera de esta tierra
nunca ha habido
un silencio tal
como en mi soledad.
Vacía y sonolienta
mi perdida vida
en cada tiempo
que no estas aquí.
Quien en condena
de su conciencia vive,
no vive
sino muere,
en conciencia muere
de su condena.
Princesa sin reino terrenal
doncella de puro sentimiento.
Vestida de encajes de seda
perfumada de violetas y romero.
Con sueltos movimientos
en cada nuevo baile,
con gracia en todos.
Sonrisa primorosa la tuya,
como también lo es
tu fría y dulce mirada.
Arráncame de la angustia,
mírame y dime:
¿Me amas?
Muchas veces
he hablado con la muerte.
Pero ahora
parece que me tiene cerca.
Mi conciencia
es insensata
vidente y soñadora
pero lucida,
verdadera y moribunda
como la muerte
propia en si misma.
Agotadora
del cuerpo y el alma
en su momento
se muestra
y aun así
cifrada y en códigos secretos
¡Oh! Dios
si existes
dame fuerzas.
Como cobarde
que soy
que otro
lo termine.
Cada estación
tiene algo especial.
El invierno frío:
tu color.
La primavera florida:
tu alegría.
El verano cálido:
tu pasión.
El otoño lluvioso:
tus lagrimas (hermosas)
tienen algo especial
en cada estación.
No todo lo duro
en la corteza
lo es también
en su interior.
Yo ni siquiera
lo soy en el exterior.
y me mandáis lanzas
afiladas
para cortarme
la piel, la carne.
Y yo lo aguanto
tanto como puedo.
Aun estando a rebosar
y una más
podría entrar.
Pero todo tiene
un propio final.
Me siento muy solo
como perdido
a través de un túnel
largo y oscuro.
Incluso mi mente
se deja,
atacada por la pereza
que tanto marchita
mi cuerpo más dolorido
a cada momento.
Cierro los ojos
y pienso en ti
a mi lado hace tiempo,
creyendo en la eternidad
que me parece llegar.
Y me intento despertar
volverme a levantar
para poder mirarte.
Tal vez a través de un cristal,
quizás llegar a tocarte.
Sólo la ilusión,
la esperanza,
y la fe en tu amor
me da fuerzas
para continuar
Trayectoria indistinta
en un espacio y tiempo
irrelevantes.
Movido por infinitos esfuerzos
uno seguido de otro,
a mi vista todos
hacia un sentido único.
Siempre eternamente desconocido
obsesivamente buscado.
A cada momento a su caza
a la misma distancia
a lo largo de la persecución
interminable
como mi propio fin
Creo saber ciertamente
sobre mi imaginación
que dicha es infinita,
y con su ilimitado uso
llego incluso a referir
lo más imposible e innombrable.
Empero es inservible
para un ínfimo intento
de una mínima descripción
de lo que yo veo en ti.
Si un conocimiento puro
llegara a la mente de algunos
escaparía en vapor transparente
sin dar señal de existencia.
porque no merece
esfuerzo tan extenuante
el explotar lo rechazado
por el mero hecho
de ser en apariencia
algo irreal.
Muchos nombres escritos
sobre una mesa
extraños a mi conocimiento
de su autentica realidad
aun cuando alguno
me haga recordar
mi propia realidad.
El lunes que viene hará 21 días seguidos trabajando, aunque siendo sincero he tenido dos de descanso. Pero después de tantos días, la crisis que me tenía acongojado, ahora me tiene hasta los mismisimos. Sin crisis tenia mi trabajo normal cada semana, y ahora con la crisis no tengo tiempo ni para mear. Y además con la circustancia de un posible ERE (si ese tio tan chungo) en breve.
¿Cómo te comes esto?
Según parece no hay mucho trabajo para que estemos todos los que estamos en la empresa, y dado que somos pocos (5 personas 3 personas y dos jefes)... me toca currar como un poseido para poder salvar mi culo.
Si claro, algunos querrian estar en mi pellejo. Con una hipoteca mayor que mi sueldo, y un piso que no veo porque me paso el tiempo fuera de casa, con dolor de cuerpo de trabajar 9 o 10 horas siete dias de la semana y en la mente mi novia, que seguramente me dejara por no verme en semanas y encima sin un duro.
A ver si llegan las navidades y unos dias de vacaciones para relarme.
EXCITACION (Ritmo de competición)
Instinto animal
que conduce
ha buscar
un puñado de sexo
romper las fronteras
de toda timidez.
Subir a lo más alto
éxtasis total
invocar a los dioses del amor.
Placeres ocultos
buscando sentir
una dulce piel
más fuerte
dentro de mi.
Romper el limite
de las ropas
destrozar cuerpos de mujer
llenarlos de placer.
Romper el rito de seducción
sexo brutal
sucio juego corporal
suaves curvas
de carne firme
donde volverse loco.
Retorcidas visiones
que calientan el ser
desenfrenada lujuria
entre la multitud
y extraños lugares.
Placeres ocultos
buscando sentir
una dulce piel
más fuerte
dentro de mi.
Una flor hermosa
en ella una mariposa.
El sol en destellos brillan,
mil colores maravillan.
Y no fue siempre la mariposa
tan bella
ni la flor tan hermosa
VAGABUNDO SIN FUTURO
Conseguir llegar a algo en la vida
sin querer luchar, es algo imposible.
Buscar el existo y la fama
solo por ser el guapo y con dinero.
Necesitas algo más
que buena suerte.
Necesitas mucho más
que dinero.
Acabaras tirado en las calles
siendo poco más que escoria
recogiendo desperdicios
que nadie quiere ya.
Sientes ahora
como caes
ves el suelo
muy cerca de ti.
Necesitas algo más
que buena suerte.
Necesitas mucho más
que dinero.
Intentas recuperar el tiempo perdido
no comprendes todavía que no puedes cambiar
solo retrasas la caída un poco más.
Tienes que volver a nacer
para cambiar tu vida.
Necesitas algo más
que buena suerte
Necesitas mucho más
que dinero.
MUNDO DE SUEÑOS
Mundo de sueños
que te excitan.
Sudores que inundan
las sabanas desgarradas.
Mundo de sueños
que te agobian.
Imágenes que engañan
a la mente inferior.
Al levantarte
vivir esos sueños.
Sigues la farsa
de aquello
que crees real.
Intentas escapar
pero sin sufrir.
Intentas escapar
de una vida cruel.
Y buscas las respuestas
antes de morir.
Y todo se derrumba
antes de morir.
Bajo tierra
ya no piensas
pero ya eres parte
del mundo de los sueños.
ANGEL CAIDO
Siempre que te veo
recuerdo aquellos días
y pienso en lo idiota que fui
al creer poder confiar en ti.
el beso que te pedí
y que nunca me diste
lo tengo clavado
en el corazón.
maldito verano
cien noches sin dormir
solo pensando en ti,
sin que tu te dieses cuenta
de como crecía el dolor
dentro de mi corazón.
te alejabas cada vez más
nunca mirando atrás
jamás imaginé el tener
que dejarte
obligado por la necesidad
de apagar el intenso dolor
que corroe mi interior,
y los años no borraran
esta herida que me has dejado.
no intentes volver
para hacerlo otra vez
por que se que te mataría
besándote una vez.
no sientes nada por los demás
juegas con ellos
como con peluches
a los que quemas
arrancándoles el alma.
todavía intento olvidar,
tu recuerdo es solo dolor
odio y miedo siento hacia ti.
ahora ya te conozco
se como eres
y nunca cambiaras,
pobre del siguiente
al que vas a destrozar.
Con esta pequeña composición
solo quiero, a ti, decir:
No soy maestro en el amor,
solo doy toda mi pasión
Aun si mis ojos fuesen cegados,
mi lengua cortada,
y mis oídos estallados.
Así por ello abandonado
tu recuerdo en mi mente
daría me locas esperanzas
de nuevo de tu amor.
Me siento abandonado
olvidado como un perro.
Falto de riego
como una mala rosa.
Mis lágrimas derramadas
no arreglan nada
ni siquiera ahogan
mi dolor,
mi locura.
Es una demencia
que aún joven
me destroza
el alma,
totalmente la mente.
Y aun así
no se el porque
de seguir queriéndoos.
Cuanto más intento
andar bien despacio,
todavía más deprisa
van mis pasos.
Cuanto más necesito
olvidar tu rostro,
todavía más tiempo
tengo tu recuerdo.
Hoy ya no conseguiré nada,
quizá mañana.
Ni una mirada atrás
necesito para saber
lo que ya sé.
Aun dentro de los sueños
la melodía de su voz
llena mi imaginación.
Con los ojos cerrados
veo su imagen
evocada por su aroma.
Ni una palabra más
necesito para saber
lo que ya sé.
Mi rostro no tiene lagrimas
pero dentro, mi alma
un llanto grita
por que no ama.
Y hoy no conseguiré nada,
quizá mañana.
Como me atormenta
la muerte de este boli.
La tinta, que le da la vida,
la deja en mis poesías.
Cuantas gracias le he de dar
y mil perdones pedir.
Esta es tu ultima poesía.
No estés triste por ello,
porque ahora morirás
y serás tu la poesía.
En los horizontes del fin
de mis tierras amadas,
el sol se oculta.
Los últimos momentos de luz
de colores imposibles,
marcan día a día,
mi nacimiento.
Caminando por la oscuridad
con pies ligeros,
rozando dulcemente la hierba;
cantando con los grillos
alegremente melodías,
olvido el poco tiempo,
hacia el fin una vez más,
que aun me queda.
Esos que me dan la vida
igualmente me la quitan.
Desapareciendo lentamente
me alejo del mundo
de su dulce calor.
Mirando bajo mi, una ultima vez
mi sonrisa da la despedida.
Mirad, el mar enfurece.
Se agita y ruge,
escuchad.
Asalta puertos, indiferente;
espuma al abordaje,
escapad.
En tierra todavía crece,
cabalga sin herraje,
suplicad.
Pongo mis manos sobre ti
y siento tu corazón palpitar.
Cada golpe entra dentro de mi,
temiendo quitarle aire a ti
y entonces me dejo ahogar
como temiendo respirar.
Pienso
y saboreo palabras,
palabras que
podrían decirte
que no te amo.
Pero,
¿No podrían decirte
que no es mentira?
(mentiría)
Pienso
y noto sensaciones,
sensaciones que
podrían decirte
que te siento.
Pero,
podrían decirte
que es mentira.
(mentiría)
Un lugar en el olvido,
de mi mente melancólica,
me rompe en dos.
La soledad me inhunda,
ahogándome de silencio,
enloqueciendo mi ser,
dejándome volver nunca.
Y tú tan cerca en el espacio
y tan lejos en el tiempo.
Un lugar en el pasado
de mi vida desesperada,
me destroza sin mas.
Tantos recuerdos sobre mi,
aplastándome con la verdad,
agonizando por errores.
Entonces siempre,
tú tan cerca en mi corazón
y tan lejos yo en tuyo.
Hoy al salir de mi cubículo he mirado a la luna, he sonreído y la imagen de tu sonrisa ha aparecido en mi mente. Su luz me lleva a recordarte, a sentirte cerca.
Estas cosas tan simples son las que me dan la vida.
Pregunto yo a quien me oiga.
¿Poesía siempre revela amor,
odio como sustituto mejor?
Conteste quien me oiga.
¿Siempre es bueno vivir,
tornándose sólo en sobrevivir?
Piense un poco quien me oiga.
¿Por qué lee cosas sin sentido,
si realmente ha entendido
lo que he escrito?
Ayer en mi recorrido hacia mi oficina, pase por una calle, donde la acera esta plantada de arboles. Alli se habian concentrado unos cuantos jardineros limpiando hojas y podando los arboles.
Esto no sería de sorprender, porque es su trabajo. Lo que si me sorprendio, y ciertamente me alegro la mañana, fue ver como uno de ellos miraba el arbol pensativamente antes de cortar una pequeña rama. Fue como ver a un escultor mirando un bloque de marmol, y componiendo en su cabeza la figura deseada.
Tan solo estuve lo que tarda un semaforo en abrirse, pero ver a alguien asi entregado a su trabajo me lleno de esperanza. Aún queda gente que siente su que hacer.
El corazón se le pierde
La cabeza es un túnel
En el que tan solo se ve
Nombrar palabras que aman
Ahora se que te ama.
NEGRA ROSA
Es la negra rosa,
negra no de maldad,
sino de amor
unido.
Amor que brota
cada mañana,
cuando resplandecen,
con el rocío,
las plateadas hojas
de la negra rosa.
Puedes coger la flor
y salir huyendo
o quedarte,
y decirme si me quieres
tanto o más que yo a ti.
Porque yo,
te quiero tanto,
como el amor
que brota,
de la negra rosa.
Versos olvidados
antes de comenzar,
y sin terminar,
que jamas serán recordados.
Palabras entrelazadas,
nuevas, imaginadas
para una única ocasión.
Con una única misión,
expresar lo que se ve,
decir lo que se siente.
Versos sin escribir
más bellos que ninguno
que se haya esculpido
en el más brillante oro.
Entran en la eternidad
como fantasmas desconocidos.
EN EL CIELO COMO EN LA TIERRA
Las estrellas en el cielo están
y mis ojos fijos en ellas.
No son mías pero si lo fueran
tampoco lo serían.
¿Y acaso serían tuyas?
No, de nadie son.
Ellas se dan a los enamorados,
a los que se quieren con el corazón.
Estrella viva brillante.
Amor vivo impaciente.
Estrella y amor fugaces simple deseo.
Estrella muerta es eterna.
Amor muerto llora el poeta.
En el cielo son estrellas.
En la tierra son amores.
Son libres pero encadenados,
nacen y no mueren.
Son lo mismo pero diferentes.
Cuando nacen dan vida,
cuando mueren destruyen.
Miro al cielo y las veo,
te miro a ti y lo veo.
Estrellas hay muchas,
amor solo uno.
Lagrimas por tus mejillas caen,
y tus sollozos a mis oídos
llegan.
En mi, lamentos por ti salen,
¿A ti fuertes mis latidos
llegan?
HOLA Y ADIOS
Un hola en principio
Amor de segundo
Odio de postre
Y un adiós al final.
Vivir siempre amando
Morir nunca si odias
Un hombre para una mujer
No hay mentira sin verdad oculta
Castidad es una soledad
Lujuria es una multitud
Goza escuchando el ruido
de todo este silencio
Imaginas lo que quieres
pero, no tienes lo que deseas
Pocos parecen vivir alegres
pero, viven de odio y miedo.
De romance
te he escrito.
La ternura,
la sensibilidad de tu boca
las he alabado.
Tu hermosura,
de toda la que eres
la he desnudado.
De tus ideas
he hecho las mías.
Como generosa tu alma
es el espejo
en el que he de mirarme.
Del narcisismo
a la adoración.
Con orgullo hablo,
pienso y sueño de ti.
Y de felicidad vivo
de compartir
tesoros y amor.
SUSURROS DE UN SUICIDA
La vida bella era,
más mucho tiempo ha pasado ya.
Y la vida no es tan bella,
bella era la vida.
Alto es el muro al que estoy subido.
Y quiero caer,
pero no puedo.
Tengo la necesidad de volver a ver,
lo querido
lo pasado.
Creo que pienso demasiado
pienso y no hago
quiero hacer y no pensar,
caer es lo que necesito.
Adelante un pie
sigue el otro
caigo al vacío
siento la muerte.
La vida bella era
más mucho tiempo ha pasado ya.
Y ya no es tan bella,
bella era la vida.
Estos días de "duro" trabajo no he tenido mucho tiempo fuera de mis interminables proyectos, véase revisar las miles de fotos que se acumulan en el disco duro, terminar de apañar el servidor del curro, apañar mis propios ordenadores (que el wifi en Linux me esta costando un poquillo), "limpiar" un poco la casa, así como alimentarme de vez en cuando y terminar la mega-obra del suelo.
Sí, aun me falta poner el rodapié de todas has habitaciones y el salón. Esto va para record. Y por cierto, ayer fui a un centro comercial a comprar cierto material (del porno, no! de ese ya tengo de sobra!) de bricolaje y cual fue mi sorpresa. Allí había mogollón de gente, comprando pero no cosas de hacerte uno mismo, no. Eso era consumismo puro. La crisis se la pasan por un lugar incomodo.
Será que la crisis solo la tengo yo.
Bueno, que ya seguiré poniendo más cosas.
En una noche sin estrellas,
en la soledad y silencio
de un antiguo bosque,
donde el miedo se siente,
duendes salen de la tierra,
escuchan como hablan
viejos arboles
con jóvenes impetuosos.
Lo lobos aúllan
a sus hembras en celo.
Los gusanos duermen
sobre hojas raídas.
El viento alimenta
de sonidos el bosque.
Allí donde vives.
Tú, bella hada,
dueña del bosque
por donde yo paseo.
Una vez te vi allí
bailando entre arboles
y me enamoré de ti.
Se que me miras
y que tienes miedo
de que sea un cazador.
Como otro que vino aquí
he intentó exhibirte
como pieza de caza.
Yo solo quiero
Hablar
y poder ver tu belleza,
para hacer la poesía
más maravillosa del mundo.
Solo te tocaré si tú
acercas mi mano a ti.
Porque yo también
tengo miedo de ti,
pero mi amor es mayor.
Si estoy atento puedo
sentir el calor de tu cuerpo,
oír tu dulce risa.
Aun recuerdo tu pelo
flotando con el viento.
Sal de tu escondite
y déjame verte una vez.
Y si no quieres verme más,
me iré y jamas volveré.
Cada uno lleva
dentro un animal.
Yo llevo en mi
un gato salvaje,
impulsivo y original.
Y creo que en ti
llevas una leona
fría y calculadora.
Pero lista para atacar,
fogosamente,
turbándome,
haciéndome desear
morir en tus zarpas.
SIENTELA
Ven a mi,
te enseñaré
la pasión.
Vamos pequeña,
siéntate, relájate.
Déjate llevar
por el corazón.
Acércate más,
¿la sientes ya?
Sube y baja
por todo tu cuerpo.
Sigue así,
despacio es mejor.
Mueve ese cuerpo.
Cierra los ojos,
sentirás todos
los poros de la piel.
La pasión
está dentro de ti.
Sientes ahora
como te mueve.
Aguanta la respiración,
grita con placer.
Déjate llevar
tan deprisa
hasta la extenuación...
¿La has sentido?
Todo tu cuerpo
se estremece
en un instante,
donde todo
eres tú
y tú eres yo,
donde tú y yo
somos uno.
Sigue aquí
cerca de mi.
Relaja el cuerpo
y también la mente.
Duerme como un bebe
sobre mi
si quieres,
yo cuidaré de ti.
HOLA Y HASTA MAÑANA
Aquella mañana no dijimos hola
pero entonces hicimos señales.
Tú no querías estar sola,
entonces estábamos iguales.
De allí aquí
has sido para mi
fruta de todos los colores
en todas las estaciones.
Fuerte como una manzana,
dulce como las uvas,
sensual como las fresas,
y como el limón que sana.
Estas como para comerte,
cada día eres mi pan
y día a día quiero tenerte.
Eres tantas cosas para mi,
mi madre, mi hija, mi amante,
que solo pienso en ti.
He intentado enseñarte
todo lo que yo sé.
He intentado aprender
todo lo que tú sabes.
Nadie puede saber
lo que sentimos,
porque solo nosotros
lo podemos entender.
Quiero darte a ti
tanto como a una dama,
y decirte siempre,
hasta mañana.
Desde que volví de vacaciones hace un par de semanas, no he tenido casi tiempo para mis ocios. Todos los minutos han sido para el trabajo; que bueno en estos tiempo tener trabajo es bastante bueno, pero no hasta el punto de atraparte inifinitamente.
Mi mente siempre anda en multitud de historias, y si el virus del trabajo no deja salir otras cosas se acumula una desdicha, una desazón en mi interior que me anula. En unos días parece que la cosa se va a calmar y podre ir desmembrando mi cerebro en su habitual desorganización de ideas.
Creo que no me ha dado la depresión postvacional porque no he tenido tiempo de ni siquiera pensarlo, y ya ha estas alturas sería un poco raro decir que me ha entrado. Así que me tendré que aguantar u a currar.
Ojos de mi viejo gato
olvidado como un faro
donde el agua ya no rompe.
Sus dientes aun afilados
como un peine fino,
brillan
y sus orejas puntiagudas
buscándome.
Listo para arrancarme
mi vida de viejo pez.
Viento gélido entre mis manos
un día de un año más.
Todos mis gritos son vanos
porque se que no me oirán jamas.
En mi simple estupidez
sigo y sigo ahogándome.
El aire escapa con rapidez,
grito y grito olvidándome.
No se si esto es cierto,
si realmente estoy vivo o muerto
o simplemente no soy,
o será quizás que
no se a donde voy.
- MUERTE EN MIS OJOS -
Extinguiéndose la luz frente a mi
en un simple instante de entusiasmo,
aterrorizado por mi ansiedad,
de divina mirada clara
hacia ti.
La marea de tu pecho
como el mar me atrae,
y de tu piel, su olor.
Deja que me embriague
de susurros en tu voz
y sentir tu oleaje.
Encallado mi barco
sobre tu arrecife
y yo enloquecido,
sin mas que el abordaje
perdiendo el sentido
en tu bello paisaje.
Quedarme aquí quiero
y busco el anclaje
quedándome ciego,
hasta que acabe
mi cuerpo olvidado
o hasta que olvide
estar enamorado.
Personas en silencio alborotado
retozando entre lodo
grasiento y húmedo.
Rojizo sangriento,
como la locura en ellos.
Irracionales
en insistente lucha,
persecución sin reglas,
eliminadas al primer momento.
Nadie los puede detener
sin acabar con ellos,
es su vida, es su ser.
No lo he dejado, es que la vacaciones absorben todo mi tiempo. a ver si en unos días me pongo al día.
¿Quién piensa en los demás
cuando uno mismo
muere por la desolación
de los que ha de pensar?
Mira hacia adelante,
con los ojos bien abiertos.
Busca el infinito
en el anaranjado horizonte.
Avanza con paso firme.
Y no olvides nunca
tu signo, tu inspiración.
Escucha los cantos
y aprende de ellos.
Que no te embargue la cólera,
e insensatez por tu soledad.
Grita y aprieta los puños,
saca de ti la locura.
Procura que no te estalle
ni la cabeza, ni el alma.
¿Te das cuenta ahora?
Esto no acaba nunca.
Acabo de ver la pelicula "El club de los cinco" otra vez más. Ya no puedo llevar la cuenta de las veces que la he visto. Está en ese grupo de pelis que ves y ves un millón de veces y aun asi te gustan, disfrutas de ellas.
y sigo sintiendo las mismas cosas. Los años han pasado ppor mi cuerpo, pero mi corazón y mi mente aún están jovenes.
Un día el sol
no volverá a salir.
Entonces yo
no volveré a vivir.
Aun siquiera
en la imaginación
de los nocturnos.
Porque en su horror
querrán olvidar
al que un día
les engaño.
Si un día,
el día no es día.
Si una noche,
la noche no es noche.
Yo entonces,
no seré yo.
Y tú también,
no serás tú.
Así entonces
yo, no yo,
y también
tú, no tú,
podríamos
amarnos,
y aun así
odiarnos
volveríamos.
¿Y quién dice que esto no es bonito?
La luz en tus ojos
me recuerdan el fuego.
El fuego en mis ojos
es la luz del deseo.
Lagrimas en tus mejillas
son ríos de amor.
Lagrimas de amor
recorren mis mejillas.
Sollozos en tu boca
me dicen te adoro.
Te quiero dicen
los suspiro de mi boca.
El viento en tu pelo
moldea la belleza.
El viento en mi pelo
no me deja ver tu belleza.
El corazón en tu pecho
brota como una flor.
Tus uñas en mi pecho
marcan mi corazón.
Déjame vivir en paz.
No me atormentes.
No puedo vivir así
con tu mirada
clavada en mi mente.
No me deja pensar
en otra cosa que no seas tú.
Con tu mirada enloquezco,
con tus caricias perezco.
Ya no oigo tu voz,
suave de una joven,
ya eres una mujer
y pido al tiempo
estar solos en el mundo,
y si tu también quieres
dame tus labios mujer.
Cuando se de cuenta
de que
yo no soy
para ella
ya será tarde
para mi.
¿Y qué hacer?
Morir
y acabar de una vez
con este suplicio
o tierno placer.
¡Oh! Permíteme seguir
en mi delirio.
Apaga la hoguera
que me quema.
Para tu pala
que me entierra.
Imagino fuera de mi
y también dentro.
¡Cretinos absurdos!
Lavado de cerebro
que uso contra mi.
Cables a mi alrededor
que saben lo que dicen.
Insolencia es vivir
aun de esta manera.
Eres tú la princesa
que aquel viejo
prometió enviar
en mi juventud,
para enloquecerme
con ardices amorosos
y la belleza imposible
de las esculturas griegas.
Eres tú el cebo
de aquel pescador
que no le importa
romperme el corazón.
Dulce carnaza
para un hambriento tiburón.
He picado el anzuelo
y no quiero salir
de estas redes.
Aunque se que
me puedo partir
en dos.
Eres una suave droga
que me está matando
lentamente, y sin querer
me desgarras
con tus caricias.
Aceleras mi corazón
con un simple roce
de tu suave piel.
Y si no estás a mi lado
pierdo la vida pensando,
soñando con tus palabras.
Has hecho de mi tu esclavo.
Soy tu sirviente
amante de su señora
y no me importa.
Mi cabeza
sobre tu hombro apoyada.
Mi alma
entre tus brazos atrapada.
Mis piernas
entre las tuyas enredadas.
Tus manos
en mi cintura apretada.
Mis orejas
con frases de amor regaladas.
Mis labios
entre tu boca adorada.
Mis brazos
sobre tu cadera rodeada.
Tus pechos
contra mi espalda bronceada.
Mis dedos
tocan tu nuca desnudada.
Tus uñas
en todo mi cuello clavadas.
Dos lenguas
mutuamente saboreadas.
De tu amor
mi vida está enamorada.
Volver tras de ti.
Mirando tu casa
esperaré.
Tu respuesta, tu negación.
Beberé por ti.
Soñando recuerdos
morderé.
Tu alma, tu corazón.
No puedo ver tan lejos
allí donde el mar no llega.
Apagas mi mente,
cierras mi boca,
escupes en silencio
tu odio hacia mi.
Mil criaturas en celo.
Es inútil tu necesidad.
Necio precio por una vida.
¡Oh! Reina de mi ser
deja que cabalgue
a través de tus montañas.
Y cuida de mi
en el desierto
que he de cruzar,
para poder llegar
a un maravilloso oasis.
Deja que nade
en tu sagrado manantial.
¡Oh! Reina de mi ser
apiádate de alguien
que solo busca
apagar su sed.
Ayer como no tenia trabajo (que no han sido pellas, de verdad) me fuí a dar un paeillo por Asturias, nada más que 400 km.
Como este fin de semana estoy trabajando, mi "casa" es una habitación en un hotel. Fuera de cualquier glamour, de las suites con yakuzzi de los maravillosos hoteles de 5 estrellas; yo "vivo" en una respetable room donde mis pertenencias se desparraman por todos lados. Eso si, siempre con un cierto orden.
¿Ycomo es la vida en una habitación de hotel? Pues en genral aburrida, como no. De vez en cuando, te ves una peli en el portatil o te conectas un rato o simplemente escuchas con rabia y cierta envidia como los vecinos se montan una orgia.
Ciertamente estos días tengo algo más de tiempo para salir a dar una vueltecilla, pero el tiempo está tonto, lloviendo con el cielo encapotado y fresquete. Sí, alguno dira que donde me meto si hace n calor de pelotas, pero en Asturias la cosas no es asi. Además que tantas veces que he venido por aquí que ya casi me lo conozco todo. Y, no es por poner excusas, tengo un sueño ultimamente que no puedo; sera por las pastillas para la alergia o porque simplemente soy un "flojo", pero es comer y entrarme una modorra impesionante.
Y si no llevara ... un segun que cuente... veinti-tantos días seguidos trabajado, pues me iría un ratin a dar un paseillo. En cuanto, me reponga de mi tristeza (que hecho mucho de menos a mi niña), intentaré tomar unas fotillos de estos maravillosos parajes.
En Noviembre pasado pase por el Embalse de Los Barrios de Luna (que bonito nombre!) y su aspecto era bastante pobre.
Ahora la imagen es muy diferente, no hay color.
Como cambia el mundo con un poco de agua. ¿Qué nos deparará el dichoso Cambio Climatico?
La lógica de la sencillez
de los sentimientos
del convaleciente a ojos ajenos
son complejas manifestaciones
de extraña locura,
¡Creada por la hermosura!
Esencia de feminidad
perfumando tu piel.
Sensuales movimientos
dibujan tus labios.
Grandes ojos
mielosos
que me mirar.
Entrelazados nuestros dedos
paseando por la arboleda
pidiéndonos besos
al imaginar un poco más allá.
¡Oh! Mis poemas
de amor
o desamor.
Versos largos
y cortos
de morir
o moribundos.
Rimas buenas
o sin rimar
de cosas sueltas
sin sentido
o con muchos.
¿Y quién sabe
cuando se acaban?
¿Se terminan acaso
en la ultima palabra,
o sigue aun dentro,
todavía en mi?
Un día quise regalarte una flor
que te recordase mi amor,
blanca por tu pureza,
blanca por tu belleza.
Y desee que no marchitara
hasta que no te amara
u otra te regalara.
En una pequeña habitación, mis ojos se acostumbran a la penunbra. Miro como pequeños puntos de lus traspasan la persiana. En mi mente está ella, que allí en la lejania dejé, al marchar. Con palabras cortas, con un beso y una última mirada.
Los minutos pasan con la lentitud de quién no tiene más que pensar, pensar en ella. Imagino donde estará, como sonreirá a su querida sobrina y que comerá. Con el pensamiento recorro con ella, la vida que deseo tener, junto a ella.
Acurrucado en un extremo de la cama, espero (y deseo) que me abrace, notar su respiración y como me mece hacia un dulce sueño.
Alma, hija de Dios
en estrecho cuerpo.
Alegre y pizpireta
de corazón.
Tan llena de bondad
que la conserva
ingenua e inocente.
Amable, despreocupada
de su risa fácil.
Niña de la época creciendo
como en la panadería, el pan
aun sin dorar en el horno.
Llevo unos cuantos días sin un pequeño tiempo , par escribir algo un poco más interesante (si es que alguna vez lo he hecho). Podría decir que estoy de trabajo hasta arriba, o que mis caseras obras me subyugan, pero, esa no es la realidad. Sin saber como, ni tampoco porque, el tiempo pasa delante de mi con tal rapidez que a cada instante me veo empujado lejos del teclado.
Y cunado alguna idea, más o menos decente me pasa por la cabeza, estoy en una situación que no me permite recordarla (eso lo mismo también se debe a la falta de riego cerebral en al mayor pare de día).
Como algunos habrán imaginado, sí, aún no he acabado de reacondicionar mi casa. Y menos mal que es pequeñita. Pero no me desanimo, ya queda menos. (pero pon la escusa de la huelga que queda muy bien).
Ahora con la subida de precios, muchos andamos un poco más justos de lo justos que íbamos ya. Eso por si no se entiende bien, significa que en vez de comerse un sándwich con dos laminas de fumar de mortadela, ahora toca solo una y una rebanada de pan doblada por la mitad. Ya no te puedes ni permitir el cartón de Don Simón, ahora agua del grifo.
Me nos mal que yo soy como los osos, que voy acumulando grasas, para los días de ayuno.
Tan suaves, en mi boca,
tan dulces, melocotones en almíbar.
Son alucinaciones
manchas en mis ojos,
que llenan mi imaginación.
Pequeños y firmes
golpes sobre mis manos.
Endiabladamente duros,
con la mirada bien alta
siempre hacia mis ojos.
Son espirales flotando
siempre dentro de mi inspiración.
Espirales de estrellas
en ciegos ventanales.
Torreones castrados
de castillo embrujado.
Una princesa transparente
asesinada con engaño.
Ahora vive sin muerte,
así entonces atrapada.
La tierra angosta,
arrasada por el tiempo,
del jardín sin flores.
Ahora solo pisado
por locos coyotes.
Cientos de historias,
batallas, en las piedras
negras como pez.
Leyendas y costumbres
cubiertas de polvo.
A la mirada de luna
solo ojos de gato
dominan el mundo.
Y su llanto en eco
traspasa muros,
mientras lagrimas
caen lentamente
recorriendo hacia el suelo
un eterno espacio.
Un lobo aúlla
en su lapida caída,
recordando desgracias
y caricias repudiadas,
todavía sin venganza.
El aire rehúsa del lugar,
huye despavorido
arremolinando polvo,
hojas pardas y secas
danzando alocadas.
Vastos prados grises
son un negro reino,
un odioso peso,
que hunde y hunde
en más profundidades,
profundidades estrechas
de desesperantes tentativas
de salir a flote.
Solo imaginar llegar,
surgir en la superficie,
por encima, al menos
una respiración profunda,
sobre inmundicias,
sobre todas, absolutamente
todas las pesadillas.
Y aun más siquiera,
si aun dudase
de lo imposible
por ella realizado,
sobrevolar en el infinito
a todo existir,
ya material
ya imaginado,
también pensado,
hablado, evocado
simplemente deseado
o jamás soñado.
La sangre fluyendo
caliente y dulce,
horrorosa a los ojos
de mentes empobrecidas
y ocultadas de esencia,
por piel, piedras,
bocas, venas,
llenando estómagos,
vírgenes de miedo,
blancos de odio,
sin ninguna impureza
trozo o parte de amor.
La indiferencia
entre muchas caras
se deja transcurrir.
Implacable galera,
abierta y sin salida
presente en cada uno
e indetectable por si,
enferma de gula,
de incontrolable destrucción,
infalible seducción.
Se adentra en las puertas
ahora ya abiertas
de cotos antes vedados.
Su dulce vino derramado
y las campanas quedan mudas
a oídos de dioses sordos.
Aun con hierba alta
y con plegarias de voces graves
siguen todavía deseando
ser eses toscas esculturas.
Alrededor, en las ciénagas
se deshace la madera podrida
de algún viejo barco hundido,
en lo que él era
y lodo pegajoso ahora es.
Sobre negra cubierta
un fuerte hedor delata
feto muerto entre manos
de un anciano achacoso5
en espera de golondrinas turcas
que traerán su destino.
Mientras enjugados los ojos
en lagrimas creídas extinguidas,
lo mira, tras arañadas cortinas,
ella aun dolida.
Arrancadas con desprecio
ilusiones, deseos, amores.
Ya un mismo instante
seguía siendo igual
y convertida en lo contrario
sin esperanza en un corazón
que había dejado de latir.
Excluida de una carne
creída pecadora por él,
y repudiada también.
En silencio, se sentía necesitado,
dependiente y enloquecido,
de apariencia ya tranquila,
en su cara marcada la resignación
y en su interior la cavilación
del momento de extirpar
el cáncer que le carcomía,
a grandes mordiscos el orgullo.
Detrás de cada sombra
vigilando y conspirando,
mientras a la luz
su faz la parecía amar.
Incluso en un momento,
quizás de debilidad,
quizás de cansancio,
podría parecer perdonar.
Poseído y sin razón
queda convertido
en un absurdo asesino.
De un incondicional amor,
sin saberlo ni buscarlo,
a un necesitado amor,
más propio de amante,
prohibido y pecaminoso.
En su recuerdo
la conciencia clava sus espuelas
afiladas, envenenadas.
A través de sus arrugas
le recorren las mejillas
lagrimas negras,
densas como su amargura,
pesadas como su carga.
A su alrededor en brumas hediondas
su nombre susurrado
pasa de aquí allí,
de allí aun más allá,
a lo lejos en el olvido.
Consumido en espera,
de clemencia o penitencia,
murmura sin sentido
lo que alguna vez fueron palabras.
Obsesionado no entiende
esta, su condena
eterna, final.
Y ella arrastrada con su furia
inocente, sin pecado
que el de amar.
Encerrada en una tierra,
en un reino desolado.
Mas aun solo ha comenzado,
es el principio del circulo,
del ciclo esencial.
Los que aquí ya han estado
muy bien lo saben.
A cada vuelta todo cambia
todavía más a peor.
Las rocas se vuelven desnudas
ardientes y negras.
Mas sienten como crece en ellos
el frío en su interior,
en el centro de su alma.
Una claridad brumosa
avanza somnolienta
entre humos negros,
que del suelo escapan
para envenenar el aire
ya de principio rancio.
Bajo la niebla, la tierra
se rompe y se abre.
Si sobre ella algo había
sin más desaparece,
y en su interior
la iluminan rayos,
que dan y quitan la vida
en mil direcciones diferentes
en infinitos sentidos
o en ninguno a la vez.
Concretar en lo más ínfimo
toda esa dilatada existencia.
Mas aun esto no es el final,
siquiera consigue ser eterno,
tan solo es algo vano,
realmente insignificante aquí.
Hoy he tenido que pasar por el trance de cada año, de la revisión medica (o tortura china!). Primero he de decir que yo, maduro como soy ya a mis años (sí, maduro por los ....), le tengo un pánico tremebundo todo lo relacionado con los hospitales (por eso te liaste con medicas y enfermeras, no?. Terapia de choque, que jodio!).
Nada más llegar (una hora tarde, que en Madrid está algo complicado aparcar), me ha atendido un enfermero muy majo que sin parar de hablar me a sustraido mi preciada sangre. Ni que decir tiene que me he mareado un poquito. Después he pasado por las pruebas de medidas, altura y peso (no voy a dar esos datos aqui, pero esta vez no me han llamado gordo a la cara). Tras esto un electrocardiograma con esas ventosas-pegatinas que son muy recomendables para la depilación (no dejan un pelo suelto) y seguido a mirar los circulitos cortados, vamos C que giran (con lo que mola eso que sale en las opticas de las letras); y luego oir pitiditos con unos cascos del año tres.
Así llegamos a la consulta del medico, esté también bastante dicharachero. Y como no las observaciones de rigor, vamos si tengo o no brazos moviles, lo tipico en un chequeo medico. Y así he pasado la mañana, con una tensión que me ha subido (normal, casi me destroza el brazo con el sopla sopla ese; que un poco más y llega al hueso).
Pero en fin, que estoy hecho un toro (en todos los sentidos, desde el rabo a los cuernos!).
Si pudiese con una mirada
un espectacular éxtasis
vivir,
sería una tuya.
Si pudiese con una palabra
el infinito sabor de una beso
describir,
sería tu nombre.
Si pudiese con una caricia
un eterno orgasmo
sentir,
solamente sería una tuya.
En mi vida ocupada
de extremo sufrimiento.
¿Qué podría hacer?
Tan siquiera aguantar
en espera de mi muerte.
¿Y no será esa la solución?
Quizás esa no sea
la verdadera incógnita.
Si tan solo pudiese
imaginar la pregunta,
rápido hallaría
la respuesta exacta.
Y aun con ella
en mi poder
necesitaría todavía saber
que hacer con ello.
Hace como casi un mes que empecé a cambiar el suelo de mi casa, y unas dos semanas y media que duermo en el sofá. Menos mal que mi hermoso sofá es grande y se duerme bastante bien.
En un principio pensé que me seria mas fácil ponerlo, pero después de luchar con paredes torcidas y puertas con marcos, me he dado cuenta que no todo el monte es orégano. Esto de las reformas (chapuzas) no es una cosa de saber usar un destornillador o una sierra, sino de paciencia y dosis extras de relajación para no liarte a martillazos con todo.
A ver si en unos meses ya voy terminando.
Solo vivo por una cosa,
pero es tan hermosa,
que tengo miedo
de llegar a perderla.
Cada minuto vivo
para estar contigo
un minuto más,
y no necesito más.
Jamás volveré a ver
el brillo del sol
si te dejo escapar.
Junto a ti,
la peor de las tormentas
es para mi,
suave lluvia de verano.
Y con las canciones de amor
lloro por ti
por amor y miedo.
Como bien puedo busco,
intento encontrar aquello
con tan inmenso
deseo de esperanza,
de simplemente quererlo hallar.
Y en la infinita nada
he de buscar,
si solo la necesidad de encontrar
es lo que quiero hallar,
en un espacio de soledad
absoluto, oscuro y tan irreal.
Tan solo hace falta un instante
para dejar huérfanas mis manos,
privadas de tu carne ardiente,
de juegos a ensuciar.
A ti remito esta suplica.
A ti pido una simple adopción.
Solo unas horas hacen falta
para olvidar seca mi boca,
y a falta de tus labios carnosos,
de mordiscos a llenar.
A ti dirijo este ruego.
A ti pido un solo recuerdo.
Suficiente es una día
para cegar tristes mis ojos,
arrebatados de tu picara mirada,
de fuego a brillar.
A ti envío esta petición.
A ti pido un presencia.
Sobra con una semana
para resecar dura mi piel,
apartada de tu fría humedad,
de caricias a rozar.
A ti mando esta plegaria.
A ti pido un remojón.
Solo se necesita un mes
para ensordecer mis oídos,
robados de tu primorosa risa,
de piropos a ocupar.
A ti llevo esta instancia.
A ti pido una única palabra.
Al fin de un año
ni siquiera mengua mi amor,
presuroso de tu favor,
de momentos a gozar.
A ti te recito estas necesidades
para pedir solución a mis pesares.
Después de saborear
un primer caramelo
quiere uno los que
aun quedan en la bolsa.
Tan embriagador es su sabor;
que aturde todos los sentidos.
Y si el deseo es fuerte,
la enfermedad queda olvidada.
Una flor blanca
por mi amor.
Una flor roja
por mi pasión.
Una flor blanca
porque te quiero.
Una flor rojo
porque te deseo.
La semana pasada empezó como otra cualquiera, con bastante sueño y pocas ganas de ir a currar. Como un lunes corriente la tarde se hizo tremendamente dura y las cabezadas eran constates. Después llegar a casa y cena y cama.
Así hasta el jueves (mi jueves), me levanto con cierta energía pensando que menos queda para el fin de semana, me hago una buena comida para disfrutar algo en el trabajo y salgo de casita con cierta gracia. La mañana transcurre con normalidad, vamos haciendo que se hace algo. Y poco antes de la hora de comer mi compañero me indica que se va en breve, yo con cara de sorpresa le pregunto como se va tan pronto. Él, estupefacto, me dice que siendo viernes, se va a la hora de los viernes.
Una sonrisa me cruza la cara, y le espeto que no puede ser, tiene que ser jueves (que o estoy seguro). Me hace mirar el calendario de la pared, del ordenador y del móvil. !Si! es viernes... entonces pienso en lo convencido que estoy de que sea jueves. Repaso mentalmente, los días y lo que he hecho en ellos... lunes... martes... ... mier... ...joder!! ¿Qué día he perdido? ¿martes, miércoles? o simplemente el jueves.
Así, que nada es más raro que mi existencia. Los relojes de mi casa tienen cada uno la hora de su propia habitación y mis semanas son cortitas. Al final tendré que ir a ver a un loquero o al Iker Gimenez, como caso claro de auto-abducción.
PD: A ver si tengo un ratillo y actualizo el blog, que las obras de casa se estan haciendo más largas que las de la Sagrada Familia.
Yo te amo
y tú me amas.
Preguntan
¿Vosotros os amáis?
Nosotros sabemos
que nos amamos.
¿Y él,
sabe si ama?
¿Y ella?
Pregunto
¿Ellos se aman?
Después de no andar por casa en medio mes, que es lo que me espera llegar? Una cantidad de trabajo considerable. No solo por limpiar todo aquello que deje por el medio (que mira que dicen que a la mierda le salen patas, pero aún no la he visto irse solita al cubo de la basura), también este puente lo voy a aprovechar y hacer chapuza en casa.
Así el día del trabajador, voy a trabajar.
¿Quién llama
al interior de mi mente?
¿Qué pretende encontrar
donde hace tiempo
no se haya nada?
¿por qué en mi cabeza,
y no en mi corazón?
Quizás ahí
pudiese haber restos,
recuerdos de mil amores,
esperanzas dejadas escapar.
Aunque verdaderamente,
¿A quién
le importa eso ya?
Aunque no lo parezca (yo mismo lo dudo a veces), trabajo. Y en ocasiones... trabajo bastante (lo que estara pensado alguno que me conoce!). Mi trabajo depende mucho del tiempo, y estoy en la "dificil" situación de elegir entre, trabajar o que llueva que llueva la virgen de la cueva. Porque yo soy solidario y quiero que todo el mundo tenga agua para su campo de golf.
Hoy por no ser un puto vago, he ido a trabajar y claro, la chupa de agua que me he llevado ha sido buena. Así, mañana si llueve, me pondre la cara de bueno y agua pa'los campos de dios.
Realmente, esto de trabajar y realmente no trabajar es un fastidio (que jodio! como se queja por na!), en principio no sabes que hacer y tu sentido de la responsabilidad (lo has tenido que buscar en el diccionario, no?) te dice que deberias hacer algo de provecho y esas cosas que rebolotean por la cabeza. Y que haces realmente, pues irte de compras, tomarte unas cervecitas y ver pasar las horas muertas.
Como veis, no tengo otra cosa que hacer que escribir un post por postear (jo que dificil de leer es esto!). Mientras que ojeo fotos de otra gente, para aprender un poquito, he visto una foto que creo que es un "clasico", un libro abierto y un anillo (aro o circulillo vario) que con la luz forma un corazon; y me pregunto a quién demonios se le ocurriría. Tendré que pensar si hay más fotos que se repitan (o casi) más que el pepino.
Día,
horas,
minutos.
Noche,
meses,
años.
Contigo,
segundos.
Solo,
milenios.
El tiempo
mi maldición.
Como una mosca
muerta y panza arriba
me encuentro cada mañana.
Anquilosado en mi cuerpo
inútil.
Cientos de veces
creo volver de nuevo
y tan sólo despierto,
para mi desdicha
de no morir.
Estos días he estado preparando fotos (y trabajando un poquito), y he dejado de lado el blog, pero ya se sabe que coo hombre que soy, no soy capaz de hacer dos cosas a la vez. La verdad es que cuando se acumulan en mis tareas un buen numero de fotos pierdo bastante tiempo en decidirme cuales escoger, y como presentarlas y adecentarlas.
Ahora me ha dado por ponerlas en Flirck, y estoy intentando que sean un poco mejores. Así con esta idea me he liado con una afición que ya venia de hace mucho, pero que no he podido realizar hasta poder tener una cámara más o menos decente (vamos que hasta hace unos años no tenía cámara).
La cantidad de cosas que me gusta hacer, me lleva a dejar cosas a medias la mayoría de las veces. No es que la deje para siempre, sino que es como tomarme un respiro de ellas. Me alejo, miro el paisaje, me relajo y en un momento dado surge la chispa que enciende otra vez la mecha de un proyecto antiguo. Con la dispersión de la mente en otras cosas me surgen las ideas para otras cosas, que me dejan relegar lo que hacia hasta otro cambio de aires.
Bueno voy a seguir revisando fotitos, que auún me quedan unas quinientas.
La muerte, tan infinita y absoluta.
Dama negra siempre repudiada.
En nuestra vida y nuestro cuerpo
que naces y creces.
Aun siempre siendo
parte de nosotros,
tanto te desconocen
que tanto te temen.
Y yo en una absurda posición
te llamo y alabo
sin saber bien porque.
Normalmente soy un tipo de lo más relajado, muy tranquilo. Pero hay momentos, días en los que no me siento así, estoy con un nerviosismo interno que zumba a mi alrededor. No es que no me deje hacer mis rutinas diarias pero si que me provoca un estado de pequeña ansiedad.
Comienzo a darle vueltas a muchas cosas, a pensar en un bucle sin fin sobre algo de lo más insignificante que se convierte en una enorme bola. Intento ver el problema (que en realidad no existirá) desde todas las perspectivas posibles, se me embota la cabeza de ideas, llegando a cansarme físicamente. Los brazos y las piernas los siento como plomo, torpes y lentos; mis ojos intentan rehuir de la claridad, pero se esfuerzan por ver todo lo que me rodea.
Y creo saber exactamente el catalizador de estos repentinos episodios psicóticos. La incertidumbre, una neblina en el discurrir de mi tiempo. No saber determinadas cosas, conocimientos banales, que pueden alterar mi futuro inmediato, en una existencia que "en ocasiones veo" ya escrita.
El corazón me trepida rápido, y los músculos se tensan, mientras mis ojos intentan dormir.
¡Oh! Mar
¿Qué harías tú
sin las orillas?
¿Y también
sin las gaviotas?
¡Oh! Alta montaña
¿Qué harías tú
sin las rocas?
¿Y también
sin la nieve?
¡Oh! Río
¿Qué harías tú
sin los peces?
¿Y también
sin corriente?
¡Oh! Dios
¿Qué harías tú
sin milagros?
¿Y también
sin los rezos?
¡Oh! Isla perdida
¿Qué harías tú
sin palmeras?
¿Y también
sin náufragos?
¡Oh! Amor
¿Qué harías tú
sin los poemas?
¿Y también
sin amantes?
¡Oh! Cielo
¿Qué harías tú
sin estrellas?
¿Y también
sin nubes?
¡Oh! Mar ¡Oh! Alta montaña
¡Oh! Río ¡Oh! Dios
¡Oh! Isla perdida ¡Oh! Amor
¡Oh! Cielo
¿Qué haré yo
sin ella?
¡Oh! Mar ¡Oh! Alta montaña
¡Oh! Río ¡Oh! Dios
¡Oh! Isla perdida ¡Oh! Amor
¡Oh! Cielo
¿También
sin su amor?
¡Oh! Ola
¿Qué harías tú
sin espuma?
¿Y también
sin la luna?
¡Oh! Bella cara
¿Qué harías tú
sin los ojos?
¿Y también
sin los labios?
¡Oh! Flor
¿Qué harías tú
sin perfume
¿Y también
sin tu color?
¡Oh! Hijo
¿Qué harías tú
sin tu padre?
¿Y también
sin tu madre?
¡Oh! Canción
¿Qué harías tú
sin las notas?
¿Y también
sin músicos?
¡Oh! Pluma
¿Qué harías tú
sin el papel?
¿Y también
sin la tinta?
¡Oh! Tierra
¿Qué harías tú
sin la lluvia?
¿Y también
sin la vida?
¡Oh! Ola ¡Oh! Bella cara
¡Oh! Flor ¡Oh! Hijo
¡Oh! Canción ¡Oh! Pluma
¡Oh! Tierra
¿Qué haré yo
sin sus besos?
¡Oh! Ola ¡Oh! Bella cara
¡Oh! Flor ¡Oh! Hijo
¡Oh! Canción ¡Oh! Pluma
¡Oh! Tierra
¿Y también
sin su mirada?
Ya estoy a salvo, aquí dentro, libre de esos monstruos. Tranquilo me siento ahora, y mi cuerpo dice lo mismo suspirando mis pulmones y latiendo más lentamente mi corazón. Una nube se posa en mis ojos y siento como mi carne y mi piel vuelven a su flacidez viscosa. Oigo un golpe muy, muy cerca de mi y el suelo me enfría la mejilla rosada, oigo chillidos que vienen a vuelo bajo. Creo abrir un ojo aunque ya lo tengo abierto y desaparezco, todo se va en un instante. Estoy como en un sueño, siento una caricia en mi mejilla, una brisa a lo largo de mi, y un pañuelo seca mi sudor. creo moverme pero verdaderamente es algo que sueño, lo deseo tanto. Mi cuero está aqui tumbado, pero mi mente está allí, a lo lejos.
Lágrimas y sollozos,
encogido y asustado.
Abrazado a mis piernas
y la cara entre las rodillas.
La luz de la calle
avanza lenta hacia mi.
Me arrastro
hacia la oscuridad
divina morada.
La vida con alguien
es aun soportable,
mas en la soledad,
que me hunde,
es preferible la muerte.
Como un zorro acorralado
temblando de fatiga y miedo
espero una punzada
de dolor y olvido.
Desde tiempos remotos, vamos hace un par de minutos, me he cuestionado si mi pobre capacidad de crear cosas, es necesaria. Empecé como un juego, un divertimento casual. Poco a poco el tema se fue complicando, incluso siendo yo tan despistado no se si algún proceso lo he hecho correctamente (seguro que no, y así salen las cosas).
Aún siendo mediocre en mi singular y alocada creación, no del todo se ha perdido la belleza, creo.
Un día cortaré la ultima flor
y la naturaleza me gritara su dolor.
Me juzgara y me encontrara culpable,
pues lo soy.
Todos clavan Sus afilados dientes en mí cuerpo. Solo queda por cerrarse mi cabeza y algunos persisten en llegar a ella. Está echa un asco, llena de arañazos y su abertura es viscosa y latente, el ojo que me cuelga, le da aún más -atrocidad, que es casi imposible. La recomposición de mí cabeza parece enloquecerles, se aterren y me atacan e intentan abordarme. Ya estoy unido, lo siento, noto esa energía en mi interior. Soy alguien nuevo, poderoso, tan fuerte me siento que voy a echar a estos intrusos fuera de mis cercanías. Me agito fuerte como un látigo, rápido como un rayo, y endurezco mi piel al máximo, lisa y dura como el mármol, resbaladiza como el suelo encerado, y ellos van cayendo al suelo, golpeándolo - con la cabeza, la espalda y, algunos que caen de pies salen corriendo aterrorizados, tambaleándose, tropezando y rodando por el suelo. A todos los que están tirados junto a mi los expulso a patadas, barriéndolos fuera de la habitación. ¿Quien me tira del pelo? ¡Ah!. Mis manos llegarán a ti ¡Cerdo cabrón!. Mis dedos lo tocan y lo atraviesan, y me arden manchados de su sangre; con un codo cierro la puerta, y uno de ellos en un último intento por quedarse dentro, salta hacia mis dominios, se ve pillado entre las maderas de la pesada puerta y el cerco de ésta misma. A los pocos instantes, un hilillo de humo sale del lugar donde él habia reventado, era como el consumirse de un cigarro.
La tierra da vueltas
y mi cabeza con ella.
Con la luz del alba
todo parece bello
y por un momento
olvido todos los dolores
pensando que cada día
es una nueva oportunidad.
¿Quien me ciega?, Eres uno de ellos ¿verdad?. Sois cobardes, atacando por la espalda, cuando duermo o cuando caigo moribundo. Siento como clava sus dientes en la bola blanca, catalejo de mi visión. Y yo con mí mano más cercana, que no sé cual de ellas es, le atrapo y tiro con fuerza de él, pero no suelta. No quiere perder su comida, su trofeo. Si le aprieto o le estrangulo sé que estallará, derretirá mi cara, y aunque le haya aplastado, yo perderé. Con el sonido de un corcho, mi ojo sale de su cueva, el nervio le sigue, estiro mí brazo todo lo más que puedo, el nervio goteando se tensa como una cuerda de violín, al máximo, a punto de romperse, pero él no deja libre la presa, es un cazador incansable. Mi otra-mano desde lo lejos, llega a alcanzar su cabeza, y con los dedos estrujo su mandíbula, y le grito como puedo, que suelte. Unos forcejeos, unos gruñidos, y cambia de presa. Ahora es uno de mis dedos objetivo de su destrucción.
Mientras todo esto ocurre, los demás me atacan en masa. Por la herida que es mi cuerpo. Estando tan concentrado en el cazador, no me doy cuenta de ello. Mi cuerpo lucha por aguantar el asedio con convulsiones, expulsiones de bilis, ácidos gástricos y toda clase de impulsos musculares. Pero ellos ya parecen decididos a terminar conmigo, no quieren jugar más. No les hace gracia ya. Mi cuerpo dificultosamente se va uniendo, tiene que cerrarse, no dejar entrar a ningunmás. Es un lucha infernal
Estos días he estado de viaje de trabajo en Oran. He intentado escribir algo con la pda pero no me dejaba.tengo que tunearla para ver si me deja en otra ocasión. Lo bueno es que he conseguido salir de allí, que la cosa era complicada. Al final via Fracia he conseguido volver a mi casita... Eso si para irme el lunes a Almeria (otra vez el trabajo!).
Que no sea por kilómetros, que el mundo tiene muchos.
Si en un día oscuro
me volviese loco,
quisiera comprensión
y cierta paciencia.
O si tan sólo cayese
en una incomprensible depresión
quisiera una ayuda,
un apoyo moral.
No te exijo
ni te pido
que me ames
únicamente lo deseo.
Ellos han trabado la puerta y lo mismo habían hecho con las ventanas. Pero ¿también los respiraderos?. No sé, si quieren cogerme en cualquier momento. Si intentara escapar, me cogerían y entonces ya no podrían jugar más, acabarían el juego. He de combatirlos, si eso, matarlos , aniquilarlos. Me repongo y les miro con la cara desencajada de furia, pero ello no parece -asustarlos, sino más bien ríen enseñando sus sucios dientes afilados. Avanzo rápido hacia ellos golpeando fuertemente el suelo y les grito, y todos en desbandada corren a esconderse. Entonces yo también corro pero no a por ellos sino a mi habitación, algunos, los más atrevidos, me siguen detrás dando saltos. Freno en seco antes de entrar, doy media vuelta y les ataco con los pies, y. ellos huyen hacia el-salón gritando, tan fuerte, que enloquece, pero no me duelen los oídos sino dentro de la cabeza, un pitido tan horriblemente doloroso. Regreso a mi cama, me siento y miro hacia allá afuera donde están ellos. Oigo ruidillos deba jo de mí y siento que hay alguno de ellos. Agacho la cabeza y veo como dos de -ellas se comen un tercero medio aplastado por mí; ellos también me ven a mí, y se asustan. Sin soltar a su compañero muerto, salen disparados, cada uno en dirección contraria. El trozo de cuerpo que sujetan con la boca, se parte en -dos con un sonido desgarrante. Como si ese fuera yo, siento como mi cuerpo se -abre, se resquebraja de arriba a abajo, y saltando al aire mil gotas de mí sangre oscurecen la habitación, ellos las beben y se mojan como si estuviesen bajo la lluvia...Hundo las rodillas en el colchón, alzo los brazos, e imploro a mi cálida sabia. que vuelva a mi, a su hogar. Gota a gota van entrando en mis -venas abiertas, ahogadas por el rancio aire; y en él como gérmenes, como bacterias, como virus apestosos; llenos de odio, ávidos de carne, ellos penetran para corroerme, quemarme. Ahora siento algunos de ellos entre mis vísceras, tengo que sacarlos entes de que me hagan más daño. Con mis manos me aprieto mis entrañas ,y van saliendo escurriendose entre mis dedos, aún aprieto más. ¡AAAHH! ¡Mamón! Aún estaba dentro, y ha explotado; me abrasa, y el dolor jamás cesará. ¿Por qué debo sufrir si no he echo mal a nadie?, y aunque hubiese sido así ¿No es excesivo éste sufrimiento?.
Mis ojos al cielo
y la copa de un árbol
baila con nosotros.
Los faroles nos llegan tenues
pero algo nos dejan ver.
Tus ojos a mi,
los míos a ti.
Con palabras susurradas
nos entendemos.
Es rápido, es intenso.
Se convierte en infinito
mientras acaba,
mas aun nos parece
excesivamente corto.
Es normal en mi caso, ver determinadas cosas a lo largo del día (aparte de los pequeños instantes de clarividencia). Pero hoy, tras adentrarme hacia un puerto de montaña (vamos carretera casi perdida) me he encontrado con un lobo. Si uno de verdad, y vivito y libre. Una pena que haya escapado tan rápido a mi superrafaga de fotos que le hubiese echado.
Es una maravilla cuando me puedo escapar un ratillo del trabajo y buscar por los lugares por donde voy, alguna imagen que retratar. Aunque si nieva y se corta la carretera a marchas forzadas, como hoy ha pasado, la cosa no es para alegrarse.
No se si tendré mucho más tiempo libre los próximo días. Pero bueno, algún minutillo si que tendré (creo!).
Despierto, siento y veo como sangro; como las sabanas se tiñen de rojo oscuro. Grito con los pulmones explotando, pero no sé si es por la pesadilla o por la realidad que veo. Mis ojos se desorbitan y creo que se escaparan lejos de mi cara y la nariz y las orejas quieren seguirlos. Abro mi est6mago con las manos, ven la luz e intentan esconderse; los saco a puñados y muerden mis dedos; algunos suben a mi boca y los escupo. Hasta que no queda uno en mi, no cejo en librarme de ellos. Aún cuando están fuera por el suelo corriendo a esconderse, los piso y los machaco aunque su sangre, si lo es, me queme los pies desnudos y marcados por sus mordiscos. Los persigo por toda la casa, y ellos huyen aloca-dos en todas direcciones. Salto hacia ellos con las manos abiertas para agarrar los, pero son tan rápidos y pequeños que escapan entre mis palmadas, se esconden detrás de los muebles, plantas o cualquier lugar, e incluso algunos se me ten dentro de cualquier objeto, o en las paredes, el suelo o el techo.
Miro a mi alrededor, les enseño mis puños y la cara enfurecida. Me tienen atrapado, acorralado. Les tengo miedo y ellos lo saben. Podrían atacarme todos a la vez y acabar conmigo; pero no lo quieren así, están jugando y yo soy su juguete. Voy acercándome a la puerta de la calle, dando vueltas, observando todos los movimientos de mis enemigos. Mí mano se acerca al pomo, lo siento gélido. Al mismo tiempo que vigilo el lugar, sus desplazamientos, sus miradas intento abrir, pero la puerta sigue en su sitio. Quito los cerrojos y vuelvo a girar varias veces seguidas, pero como antes, las bisagras no chirrían. Oigo un pequeño ruido detrás de mi, me doy la vuelta agitando las manos, ahí están, frente a mi, formando un semicirculo a mi alrededor. Ellos son muchos y yo solo uno. Mi espalda golpea la entrada y mi mente comienza a pensar en como salir de aquí.
Sin saber donde
con mis manos agarrarme.
Sin poder más
con mi cuerpo moverme
me acabe ante ti.
Voy a cerrar los ojos e intentaré dormir, aunque sea un poco; pero mejor pensado que sea mínimo para no soñar y que así no me turben mi desgastada cabeza. Ellos saben que yo sé qué ellos sabe que yo sé. Y quieren meterse dentro de mí en todo momento. Cuando abro la boca, cuando respiro y si pueden lo intentan -cuando escucho como se mueven las cosas. Pero su puerta preferida hacia mi interior es el sueño, la pesadilla. Si, esa es por donde mejor me asaltan, porque saben que estoy indefenso, que me ocupa el trabajo de enhebrar esa aguja. con un no hilo. Mis ojos están en su punta, veo como se acerca lentamente hacia el interior de su fin; poco a poco la distancia se hace mínima, y en el instante que ésta es nula... Veo la aguja otra vez al fondo del espacio. Y me doy cuenta de lo que pasa; cada vez que llego a enhebrar se deshace ese trabajo, y debo empezar de nuevo, me angustia y me apasiona a la vez, cada vez más, obligándome a volver a intentarlo.
Mientras pienso en esto, ellos me atacan, atraviesan mi piel y cuanto más me ofusco en la indecible locura, ellos perforan mi carne hasta los huesos. Y me carcomen, construyen túneles, galerías a lo largo de mi cuerpo.
Enloqueceremos todos,
algunos mucho antes,
otros poco después
del gran desastre,
del derramamiento
y perdida de pensamientos.
Aunque algunos,
que son bastantes,
no sufrirán la enfermedad
de algo que no
han llegado a tener
y aun en la posibilidad
de cierta casualidad
a poseer alguno,
estará olvidado
y lejos ya
de su conocimiento
Hoy desde las ocho de la mañana, que como todos los días me tomo el cafe mirando las noticias, he visto la noticia que me ha perseguido todo el día. Sí, a Barden le han dado el Oscar. Muy bien, noticia interesante, pero ¿también a las once de la mañana , o las tres de la tarde. Incluso ahora a las (a ver que hora es) las ocho de la noche?
Creo que es una noticia noticiosa, pero hay un limite. Ahora mismo creo que no ha pasado nada más en el mundo que no sea lo del dichoso "esto es para España". Joder! que solo es un premio, un tío en pelotas.
La luna casi en su plenitud gobierna la noche. Ilumina en penumbras, callejones y casas olvidadas. Las nubes difuminan el fuerte azul marino donde navegan estrellas rumbo a algún lugar. Todo me parece bonito... • ¡No! ¡Es mentira! • Jamás fue así, que lastimera es mi voz, que miedo me domina, tan fuerte, tan odioso. Mil imágenes veo entre las sombras, cada cosa se mueve con vida propia, y oigo como me llaman aunque me repito insistentemente que es mi imaginación, la muy absurda que me engaña. ¿Y puedo combatirla?. Puede que si pero aún así no creo que consiguiese desprenderme de esos seres que me acechan detrás de. los objetos, de las luces, las sombras o incluso detrás, pegados como lapas, de mi.
Todo es dolor en mi, en cuanto atrapo algo que puede hacerme feliz, algo me lo arrebata y me destroza y me hunde en la desesperación. Y no quiero pedir consejo, aunque sé que lo necesito. Quiero morir, pero a la vez pienso que todo esto es una tontería; y debería pasar de todo y dedicarme a cualquier otra cosa. A veces intento dormir, pero rápido me asaltan todos esos pensamientos que me embotan y van carcomiendo mi mente y mi moral
Sincera necesidad en todo momento
de todo amar individual,
tan difuso en la mente, en el sentimiento.
Intenso y directo en toda totalidad
durante algunos minutos,
después efímero puesto a lapidad.
Cuando el mundo se mueve bajo mis pies al andar, pienso en ti. Cuando el horizonte funde el cielo y el mar, pienso en ti. Cuando salen los brotes de las plantas, pienso en ti. Cuando el viento baila entre las hojas, pienso en ti. Cuando pienso en ti, el mundo es más hermoso.
