Las obras del faraón
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Vida
Hace como casi un mes que empecé a cambiar el suelo de mi casa, y unas dos semanas y media que duermo en el sofá. Menos mal que mi hermoso sofá es grande y se duerme bastante bien.
En un principio pensé que me seria mas fácil ponerlo, pero después de luchar con paredes torcidas y puertas con marcos, me he dado cuenta que no todo el monte es orégano. Esto de las reformas (chapuzas) no es una cosa de saber usar un destornillador o una sierra, sino de paciencia y dosis extras de relajación para no liarte a martillazos con todo.
A ver si en unos meses ya voy terminando.
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