jueves, 29 de mayo de 2008

Revisión interna

Hoy he tenido que pasar por el trance de cada año, de la revisión medica (o tortura china!). Primero he de decir que yo, maduro como soy ya a mis años (sí, maduro por los ....), le tengo un pánico tremebundo todo lo relacionado con los hospitales (por eso te liaste con medicas y enfermeras, no?. Terapia de choque, que jodio!).
Scrubs

Nada más llegar (una hora tarde, que en Madrid está algo complicado aparcar), me ha atendido un enfermero muy majo que sin parar de hablar me a sustraido mi preciada sangre. Ni que decir tiene que me he mareado un poquito. Después he pasado por las pruebas de medidas, altura y peso (no voy a dar esos datos aqui, pero esta vez no me han llamado gordo a la cara). Tras esto un electrocardiograma con esas ventosas-pegatinas que son muy recomendables para la depilación (no dejan un pelo suelto) y seguido a mirar los circulitos cortados, vamos C que giran (con lo que mola eso que sale en las opticas de las letras); y luego oir pitiditos con unos cascos del año tres.

Así llegamos a la consulta del medico, esté también bastante dicharachero. Y como no las observaciones de rigor, vamos si tengo o no brazos moviles, lo tipico en un chequeo medico. Y así he pasado la mañana, con una tensión que me ha subido (normal, casi me destroza el brazo con el sopla sopla ese; que un poco más y llega al hueso).

Pero en fin, que estoy hecho un toro (en todos los sentidos, desde el rabo a los cuernos!).

1 comentario:

Ledicia dijo...

jajaja,

eso mismo lo vivi yo hace un par de semanas! y tb me mareé... uff

Un saludo!