miércoles, 13 de febrero de 2008

La hora exacta


Al levantarme lo hago con la hora del móvil (recurso muy popular), y miro la hora del verdadero despertador. Mis ojos aún entre tinieblas parecen confundir los dígitos digitales de ambos relojes. Después, de paso a la cocina, la atómica luz del vídeo, me quiere tomar el pelo, y ya el reloj brillante del microondas me confirma que: o tengo resaca de muerte o el espacio temporal de los viajes en el tiempo existe.


Cuatro relojes (bueno cinco si contamos el del ordenador) y ninguno da la misma hora. Si al menos tuvieran una diferencia de unos minutos, lo entendería. He viajado en el espacio unos 20 metros y he tardado alrededor de .... 90 minutos (contando el tiempo de móvil a micro). Eso nos lleva a la cuestión de la velocidad (espacio/tiempo), unos cuatro milímetros por segundo. Velocidad más que suficiente, no? Que luego vamos estresados.


Y luego esta, el concepto de "¿Qué hora será?". Porque, ¿con cuál nos quedamos?, nada mas despertarnos, con las ganas que dan de quedarse dormidito un ratito más... Yo por si acaso, voy saliendo a trabajar, que con mi supervelocidad, lo mismo hoy si llego pronto.

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