viernes, 22 de enero de 2010

1997-2000 LXXIV

Se me va la mente,
por allí se aleja.
Sin miedo alguno
al pasado o al futuro.
Por un momento regresa,
y ya escapa al verme.
Viaja muy rápido,
desde el gélido conocido
al desconocido cálido.
Despega a tocar el cielo
llevado por el viento,
y abrazado por la nubes
espera dominar sus luces.

No hay comentarios: