jueves, 1 de noviembre de 2007

Verdades como puños

Ayer me dijeron una cosa, que siendo sincero duele. "Que no le gustaban mis poesías", y claro como el autor pues eso no sienta bien, aunque digas: "eso no me importa, no las escribo para que gusten". Todas esas excusas son solo para no ponerte a llorar como una magdalena.

Esta claro que a cualquiera que haga algo, le gusta (se regocija en su propio ego) cuando le dicen que gusta su obra. Incluso al albañil que monta su tabique y el compañero le reconoce el trabajo, a este se le ponen los pelos de punta del gusto.

En mi caso, igual que al resto de la humanidad, se me cae la baba conmigo mismo cuando me lo dicen (no se me nota porque soy muy rápido quitándomela y poniendo cara de "no pasa nada") y al contrario cuando me dicen que no les gusta. Aunque sinceramente se que no son para tirar cohetes (vamos que no soy un Neruda), simplemente son reflexiones de alguien un pelin perturbado (porque a quien en este mundo se le ocurre pensar en verso, con los tiempos que corren).

En resumiendo, que seguiré poniendo lo que a mi me de la real gana.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Haces bien. Sigue así. A lo tuyo y el resto te seguiremos como hasta ahora. jijiij.
En genral en el anonimato pero hoy......... yo también he sentido la necesidad de dejarte huella.
Buena tarde